Región Centro. Junto a sus pares de Córdoba y Entre Ríos, el mandatario santafecino destacó la fortaleza en la asociación de diferentes provincias para que el AMBA no pueda seguir llevándose puesto permanentemente al interior argentino.
El gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro afirmó que “para nosotros asociarnos las diferentes provincias significa fortalecernos, significa entender que desde Buenos Aires o desde el AMBA no van a poder seguir llevándose puesto permanentemente al interior argentino».
De esa manera se pronunció el santafecino junto a sus pares de Córdoba, Martín Llaryora, y Entre Ríos, Rogelio Frigerio, al encabezar ayer la conformación de la Mesa Permanente de Gestión de Emergencias Complejas.
El objetivo del ámbito, que tuvo su primer encuentro en el Salón Blanco de la sede del Gobierno de Santa Fe en Rosario, es mejorar la capacidad de respuesta ante situaciones de crisis que afecten a una o a todas las provincias de la región.
«Nosotros sostenemos económica y financieramente el modelo federal de nuestro país, pero lamentablemente en cada uno de los hechos y en cada uno de los gobiernos que vienen pasando en el orden nacional, siempre sentimos que a nosotros no se nos mira”, aseguró Pullaro.
En este plano, sostuvo que «lo que estamos haciendo aquí en la Región Centro es ser más eficientes en la administración de los recursos públicos, es lograr adelantarnos a los problemas que podemos tener, ponerlos arriba de la mesa y resolverlos de manera mancomunada y conjunta”, y reconoció que “si nos asociamos, si creemos, si somos honestos políticamente y trabajamos juntos, podemos salir adelante y este ejemplo que estamos haciendo lo trasladaremos al resto de la República Argentina”.
En tanto, Frigerio advirtió que “uno de los desafíos que tenemos por delante es estar preparados para cualquier acontecimiento que venga en el futuro, incluso muchos de estos vinculados con el cambio climático. Por eso no podemos esperar a que vengan los incendios sin saber con claridad qué tiene que hacer cada una de las partes”, por lo que aseguró que “si trabajamos en equipo cuando suceda un problema en alguna de las tres provincias vamos a ir las otras dos rápidamente en ayuda”.
Por su parte, el cordobés Llaryora consideró que “lo de hoy es un cambio a imitar como un paradigma nuevo, porque en un accidente, en el siniestro, el tiempo es vida y cuando se vuelve una catástrofe, ya no es solo el tiempo, sino es la organización».
«Por eso creo que esto es un salto de calidad en lo que tiene que ver en los eventos extraordinarios que superan a veces las capacidades de una ciudad, de un cuartel y a veces de una provincia. Y estar antes de tiempo, estudiando la casuística, organizando los protocolos, sabiendo cuáles son las líneas de acciones, con qué recursos contamos, son vidas que vamos a salvar”, acentuó.