EEUU. Sin embargo, OIEA advirtió que en el interior de la instalación hay contaminación radiológica y química.
El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Mariano Grossi, confirmó ayer que no se han registrado nuevos daños en la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz desde el ataque israelí del pasado viernes.
No obstante, Grossi advirtió que en el interior de la instalación hay contaminación radiológica y química.
A su vez, detalló ante la Junta de Gobernadores que fue destruida “la infraestructura eléctrica de la planta, que incluía una subestación eléctrica, un edificio principal de suministro de energía, así como el suministro de emergencia y generadores de respaldo”.
“El nivel de radiactividad fuera del sitio de Natanz ha permanecido sin cambios y en niveles normales, lo que indica que no hay un impacto radiológico externo sobre la población o el medio ambiente como resultado de este evento. Dentro de la instalación de Natanz hay tanto contaminación radiológica como química». informó.
No se reportaron daños en otras instalaciones como la planta de Fordow, el reactor de agua pesada en construcción en Khondab, ni en las instalaciones de Bushehr y el reactor de investigación de Teherán. Sin embargo, en el sitio nuclear de Esfahan, cuatro edificios fueron afectados.
