
Entre Ríos. Según se indicó desde Enersa, este importante pico de demanda fue superado sin ningún tipo de inconvenientes y sin que se registraran cortes ni saturaciones del sistema.
La distribuidora estatal Enersa respondió sin inconvenientes ante el pico histórico de demanda que se dio este lunes, demostrando la solidez de su sistema eléctrico y el resultado de su planificación. «De este modo, aún con la tarifa más baja de la Región Centro, sigue afianzando un servicio seguro y sólido, que permite acompañar el crecimiento de la demanda sin afectar la calidad del suministro», se dijo desde la administración provincial.
Ante la intensa ola de frío que afecta a la provincia, este lunes a las 20.59 se produjo un nuevo récord histórico de potencia operada para la temporada invernal, con 730 MW, superando el máximo registrado el pasado 23 de junio, que fue de 726 MW.
Este incremento se da en un contexto donde el consumo de energía en junio creció un 12,5% en comparación con el mismo mes del año pasado, reflejando una demanda sostenida en aumento.
Según se destacó desde Enersa, este importante pico de demanda fue superado sin ningún tipo de inconvenientes y sin que se registraran cortes ni saturaciones del sistema, lo que confirma la calidad del servicio eléctrico que se brinda en Entre Ríos.
«Aun siendo la distribuidora con la tarifa más baja de la Región Centro, la distribuidora sigue consolidando un sistema eléctrico confiable y robusto que le permite acompañar el crecimiento de la demanda sin afectar la calidad del suministro. Este nuevo récord es una muestra concreta del camino que se transita, con obras estratégicamente planificadas que refuerzan el compromiso con el desarrollo energético de la provincia», se señaló.
«Superar este récord sin inconvenientes habla no solo de la solidez de nuestro sistema eléctrico, sino también del compromiso permanente que asumimos con cada entrerriano para garantizar un servicio seguro y de calidad», expresó el presidente de Enersa, Uriel Brupbacher.
La empresa estatal recomendó realizar un uso responsable y eficiente de la energía, especialmente en esta época del año. Esta práctica contribuye a cuidar la economía del hogar, a mantener la calidad del servicio eléctrico y a beneficiar a toda la comunidad.