
Santa Fe. La medida dispone la realización de narcotests sorpresivos, periódicos y no anunciados para policías, penitenciarios y autoridades políticas.
El gobernador de la provincia de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, dio el puntapié inicial a la implementación de controles antidoping para los integrantes de las Fuerzas de Seguridad, y se sometió al primer test que dio negativo, ante la presencia de los medios de comunicación.
El resultado del narcotest del mandatario se conoció de inmediato, y en su caso arrojó resultado negativo en las sustancias que se miden: cocaína, marihuana, benzodiazepinas, opioides, metanfetaminas y anfetaminas, se informó,
La medida se enmarca en el nuevo plan de fiscalización impulsado por esa cartera, que dispone la realización de narcotests sorpresivos, periódicos y no anunciados para policías, penitenciarios y autoridades políticas.
La resolución fue firmada por el ministro Pablo Cococcioni, que también integra el padrón de personas sujetas a control y ayer realizó el suyo, también con resultados negativos. Solo durante la mañana de ayer, se realizaron alrededor de 30 narcotest.
La implementación retoma una política que Pullaro ya había impulsado en 2017, cuando era ministro de Seguridad. “Queremos tener la mejor fuerza de seguridad de la Argentina: la mejor Policía, la mejor Agencia de Investigación Criminal y el mejor Servicio Penitenciario. Para eso no alcanza con invertir en infraestructura o equipamiento; también necesitamos que nuestros hombres y mujeres estén en condiciones de brindar ese servicio”, subrayó el gobernador.
“Entendemos que el consumo de estupefacientes no es exclusivo de las fuerzas de seguridad, sino que atraviesa a distintos sectores de la sociedad”, indicó el mandatario, y puntualizó que el test combina diferentes reacciones químicas: cocaína, marihuana, benzodiazepinas, opioides, metanfetaminas y anfetaminas.
Pullaro destacó que “actuamos con ejemplaridad: fuimos los primeros en someternos a la prueba. El ministro me avisó ayer que las muestras llegarían hoy y pedí estar presente para dar el ejemplo. Aquí no se persigue a nadie por un consumo problemático, pero sí se brindarán todas las herramientas para tratarlo; lo que no vamos a permitir es que haya funcionarios que consuman sustancias ilegales”.
Los estudios serán realizados por laboratorios externos; los resultados se entregarán en sobres cerrados a los superiores jerárquicos, en una cadena que culmina en el propio gobernador. “Los tests se harán mediante un convenio con la Fundación Argentina de Toxicología y consisten en un hisopado bucal que detecta varias sustancias”, explicó Cococcioni. Los resultados quedarán a disposición de la autoridad correspondiente para adoptar las medidas que se determinen.