País. Laboratorio Lemos SRL registró ante la ANMAT la solución de inactivación y preparación de muestras “INACTIV AR”, producto fruto del trabajo de una red de equipos de investigación que cuentan con financiamiento de la Agencia I+D+i en el marco de la Unidad Coronavirus.
La Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) en el marco de la Unidad Coronavirus que integra junto con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación y el CONICET, financió el proyecto de investigación dirigido por el Dr. Alberto Kornblihtt.
El proyecto consiste en el desarrollo de un protocolo completo de inactivación de muestras y preparación de ARN total para la detección de SARS-CoV-2 por diferentes métodos para abaratar costos y permitir la realización de diagnósticos en cualquier laboratorio de investigación, a partir de un método de PCR más flexible y de la inactivación de las muestras clínicas en su lugar de obtención.
De esta investigación derivó la solución de inactivación de muestras INACTIV AR producido por Laboratorio Lemos SRL y que recientemente acaba de recibir la autorización de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). INACTIV AR cuenta con la ventaja de ser de fácil utilización, reducir desafíos logísticos, no requerir de grandes equipamientos y ser compatible para ser usado tanto para detección por PCR como por los métodos rápidos argentinos como ELA ChemStrip y NeoKit.
La inactivación de las muestras es un proceso necesario para poder trabajar sin correr riesgo de infección. La técnica desarrollada por este proyecto potencia las capacidades nacionales de testeo y diagnóstico al hacer posible que instalaciones con menores niveles de bioseguridad puedan ser usadas para el análisis de muestras sin exponer a quienes trabajen en aquellos lugares al virus activo u otros patógenos que puedan estar en la muestra.
Este proceso se realiza mediante la aplicación de INACTIV AR a la muestra que permite someterla al calor durante unos ocho minutos inactivando el virus, pero conservando los ácidos nucleicos necesarios para su detección. De esta forma la manipulación de la muestra es segura. Además, las muestras inactivadas con este método son estables a temperatura ambiente por al menos una semana haciendo más simple el manejo y la logística de transporte de las mismas.
Este trabajo forma parte de un consorcio conformado por dos iniciativas más que también fueron seleccionadas en la Convocatoria IP COVID-19 y coinciden en sus objetivos: la optimización de diferentes aspectos del método de diagnóstico de COVID-19, cuyo agente etiológico es el SARS-CoV-2, basado en la extracción y purificación de ARN, seguido por RT-qPCR.
La iniciativa dirigida por la Dra. Julieta Imperiale se concentró en el primer paso de extracción y purificación de ARN, apuntando al desarrollo de un método basado en nanopartículas magnéticas. El equipo a cargo Fernán Agüero produjo una transcriptasa reversa (RT) optimizada, un reactivo utilizado en los diagnósticos, que acelera y simplifica los test moleculares de detección de COVID-19.
El trabajo colaborativo entre estos grupos de investigación permitió acelerar la obtención de resultados a partir del intercambio y complementación de los desarrollos sobre principios de testeo. Al mismo tiempo, el uso de diferentes metodologías para el diagnóstico de COVID-19 permite generar opciones que se adapten a diferentes escenarios de testeo.