País. A su vez, el mandatario puntano se diferenció del Gobierno del Frente de Todos. «En San Luis no somos kirchneristas ni fernandistas», destacó Rodríguez Saá, entre críticas a la vicepresidenta y los dirigentes más cercanos a ella, como es el caso de los ministros K y la diputada Fernanda Vallejos.
El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, manifestó que la carta publicada por la vicepresidenta Cristina Kirchner en el punto más alto de la crisis que se desató en el Gobierno «ultrajó la figura presidencial» y señaló, además, que en el oficialismo de San Luis no son «kirchneristas ni fernandistas».
Ante funcionarios de su administración, Rodríguez Saá realizó un duro diagnóstico sobre la derrota electoral que sufrió su partido, Fuerza San Luis, así como el Frente de Todos -integrado por su hermano Adolfo Rodríguez Saá en el Senado- en las primarias del pasado 12 de septiembre y sobre la pelea posterior entre el presidente Alberto Fernández y la titular del Senado de la Nación.
El mandatario peronista contó que asistió a la reunión con Fernández y gobernadores el pasado sábado y que allí le dijo al jefe de Estado: «En San Luis no somos kirchneristas y tampoco somos fernandistas. Somos Fuerza San Luis».
Tras reconocer que «la situación económica es desesperante», el puntano acentuó: «Pero se agravó la situación nacional estos días y se lo dije al Presidente delante de todos».
Rodríguez Saá criticó las renuncias que hicieron circular los ministros kirchneristas del Gabinete y consideró que «se generó una situación de escándalo y eso roza la investidura presidencial», consignó NA.
En su crítica al kirchnerismo, el mandatario provincial puntualizó: «Hubo una declaración de la diputada nacional (Fernanda) Vallejos que manchó la investidura presidencial. Y hubo una carta de la señora vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner que rajó, ultrajó la figura presidencial».
Según contó durante el acto que fue transmitido por su canal oficial de YouTube, Rodríguez Saá le dijo al Presidente que había asistido a esa reunión para «hablar de la crisis» y se encontró «con un hecho consumado», y que le expresó: «Me he quedado para hacer un desagravio a la investidura presidencial que no se puede, no se debe maltratar».
«Eso es lo que pienso de la elección y de lo que pasó esta semana», señaló el mandatario y agregó: «El Presidente me agradeció la sinceridad de mis conceptos. Y quedó claro clarita mi posición: San Luis no es ni kirchnerista, ni fernandista. Somos lo que somos».
