Buenos Aires (22/7/17). Si bien las encuestas ubican a la ex presidenta por encima de los otros precandidatos, desde el entorno kirchnerista aseguran que no les «sobra nada».
El objetivo de las campañas electorales es acaparar votos. Por esta razón, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner salió esta semana a recorrer la zona agrícola bonaerense, donde aprovechó para visitar un tambo en Lincoln, teniendo en cuenta que sus asesores le aseguraron que la disputa con los precandidatos de Cambiemos, por los votantes volátiles, está muy pareja.
En este sentido, le recomendaron que vaya en busca de los sectores que son reacios a votar al kirchnerismo. El plan de perforar el famoso “techo”, que le asignan a la ex mandataria por la imagen negativa, se creó de encuestas que señalan una diferencia para agosto mínima de tres o cuatro puntos a su favor. “No nos sobra nada. Tenemos que juntar votos de todos”, declaró un dirigente cercano a CFK.
La iniciativa también la adoptaron los candidatos distritales. El diario Perfil reveló que uno de los integrantes a diputados nacionales de Unidad Ciudadana afirmó que la idea, que llevarán a cabo durante estas semanas hasta el día de la elección, será seducir a la clase media que votó a Mauricio Macri y está desencantada porque le va peor económicamente.
“En mi distrito cerraron comercios y bajaron mucho las ventas. Antes, esa clase media se endeudaba para viajar al exterior. Y ahora lo hace para ir al supermercado. Sobre ellos tenemos que trabajar”, admitió el candidato.
“Nosotros tenemos que ser el voto útil contra el Gobierno”, afirmó otro dirigente en diálogo con el mismo diario. Sin embargo, sostienen que el problema es que el votante de Sergio Massa, que conserva una buena porción del conurbano, es el menos proclive a votar a Cristina. “Nosotros identificamos que el voto massista, de agosto a octubre, si es que se muda, se muda a Cambiemos”, analizó un diputado nacional kirchnerista.
Con este contexto, desde el círculo más cercano a la ex presidenta afirman que es muy probable que el juez federal Claudio Bonadio ordene la detención de Cristina Kirchner antes de las elecciones de octubre en relación a la causa que se investiga si los alquileres de inmuebles de la familia Kirchner eran sobornos para la adjudicación de obra pública.
En este sentido, Bonadio detuvo esta semana al contador de los Kirchner, Víctor Manzanares, y advirtió en diálogo con Radio Mitre que no se rige por el calendario electoral a la hora de avanzar con una causa. Estas declaraciones pusieron alerta a los fieles kirchneristas que sintieron que el Juez dejo entrever que irá por “todo”. Ayer, el abogado de CFK dijo que Bonadio quiere interferir con “el proceso electoral”.
En tanto, se esperan más apariciones de Cristina, sobre todo en el conurbano bonaerense, pero también en el interior, con una estrategia polarizadora que insistirá sobre las consecuencias económicas de las políticas de Macri. (ARGNoticias)
