País (1/3/19). «Vamos argentinos, vamos con fuerza, vamos en serio, vamos con coraje, vamos con pasión», arengó el mandatario, al cierre de su mensaje de apertura de un nuevo período de sesiones ordinarias del Congreso nacional.
El presidente Mauricio Macri convocó hoy a los argentinos a «no aflojar, a no tirar la toalla», señaló que «el futuro está en cada uno de nosotros» y exclamó «vamos con fuerza, vamos en serio, vamos con coraje, vamos con pasión».
«Nuestro tiempo es hoy. No dejemos que los predicadores de la resignación y el miedo le ganen a la esperanza porque nuestra esperanza es fuerte, está basada en lo que sabemos que podemos hacer», enfatizó Macri.
Además, remarcó: «Yo soy el primero en saber lo que han sido estos meses, cuánto dolor, cuánta angustia, y me he hecho cargo».
«Pero yo estoy seguro de que esta es la generación que con valentía decidió encarar lo que nunca se había hecho, decidió hacer una reforma profunda, cambios de verdad en nuestro país», señaló.
«Juntos nos hemos comprometido a ser una sociedad en serio y juntos lo estamos haciendo y por eso les digo ¡vamos argentinos, vamos con fuerza, vamos en serio, vamos con coraje vamos con pasión ,este es nuestro país y juntos lo vamos a llevar adelante! ¡Vamos Argentina!», exclamó el presidente.
«Estoy acá por el voto de la gente»
El discurso de Macri en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso estuvo atravesado por momentos de tensión, gritos, insultos y cantos. Uno de esos cruces fue con la oposición, que interrumpió con irónicos aplausos al Presidente cuando éste hablaba sobre la economía del país.
Cuando el Jefe de Esatdo dijo que en los dos primeros años de su mandato la «economía creció y la inflación bajó», todo el bloque opositor se levantó, aplaudió y vitoreó de manera irónica.
«Creció la economía, bajó la inflación, aumentaron la inversión y las exportaciones. También bajó la pobreza; creamos 700 mil puestos de trabajo», destacó el mandatario.
La vicepresidenta Gabriela Michetti tuvo que intervenir en más de una oportunidad para pedir silencio. Allí fue cuando Macri desafió a la oposición: «Los gritos e insultos no hablan de mí, hablan de ustedes. Estoy acá por el voto de la gente».
Esa frase desató la euforia del oficialismo y los simpatizantes de Cambiemos que estaban presentes en el recinto. Lo acompañaron con el slogan de campaña «Sí, se puede».
Entre varias expresiones que aludieron al Gobierno kirchnerista, a modo de crítica, Macri remarcó: «Juntos, estamos construyendo los cimientos más profundos. Con obras que empiezan y terminan, que valen lo que cuestan; con rutas y autopistas más seguras».
Por otro lado, puntualizó que «ya no aceptamos que nos mientan, que nos oculten datos relevantes o que pongan en jaque la institucionalidad de nuestra democracia. Ya no creemos en las soluciones mágicas porque sabemos que las transformaciones profundas llevan tiempo».
En defensa de las duras medidas adoptadas durante estos tres años de mandato, el líder de Cambiemos enfatizó que «hoy podemos decir que la Argentina está mejor parada que en el 2015. Mejor no significa que ya estamos donde queremos estar, sino que hemos salido del pantano donde estábamos».
«Hoy hay un equipo que gobierna pensando en el largo plazo, que dice la verdad, que pone los problemas sobre la mesa, que transparenta el valor de las cosas y que asume la inflación, la pobreza y la inseguridad», remató. (NA,TN y Redacción).
