Córdoba. La medición de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) del IBP-Córdoba del mes de Abril, presenta un valor de $ 1.926,98. El dato significa, el ingreso que requirió una familia compuesta por 2 adultos y 2 niños para no caer en la indigencia.
Por su parte La Canasta Básica Total (CBT) que determina el ingreso mínimo que debe alcanzar una familia para no quedar comprendido en la pobreza se estableció en $ 4.393,50.
La variación mensual de la CBA y la CBT (con respecto a marzo de 2013) fue de -0,10% en ambos casos.
La información señala a abril como el primer mes del año en el que no se produce incremento de precios. Pese al último dato, el acumulado de lo que va del año ya se ubica en el orden de 11,63 por ciento.
Los resultados correspondientes al mes de Abril del Índice Barrial de Precios (IBP) fueron difundidos por el Centro de Investigaciones Participativas en Políticas Económicas y Sociales (CIPPES).
Diferencias
Desde la entidad, señalaron que estos valores mantienen las diferencias del IBP respecto a los valores del INDEC. La Canasta del IBP Córdoba representa 2,65 veces la canasta del INDEC para una familia tipo. Esto significa que para la misma familia, el IBP muestra que se necesitan $2.738,09 más de lo que señala el Indec para no estar en situación de pobreza.
Los productos del rubro carnicería fueron los que más crecieron en toda la canasta de alimentos, con un alza mensual del 2,99 por ciento, y lo que más se redujo en valor, fue verdulería, con una caída del 5,98 por ciento mensual.
La canasta de alimentos en Córdoba sigue siendo la más cara del país. Le sigue en valor la canasta de Mendoza, con $4457,05.
Los datos sociales que se extraen del Índice Barrial de Precios, señalan que la indigencia en la provincia de Córdoba se extiende a 244.350 personas (7,26 por ciento de la población), mientras que la pobreza comprende a 903.071 personas, que equivale a cerca del 27 por ciento de la población.
Cuestionan anuncio del gobierno
Sobre la decisión del Ejecutivo Nacional de involucrar organizaciones afines al gobierno en el control de precios, el Director Ejecutivo del CIPPES, Pablo Gallo expresó que “nos preocupa que se aliente a hostigar a los comerciantes”.
«Los pequeños y medianos comerciantes no son el problema. No fijan precios ni tienen capacidad de discutir aumentos. Desde nuestra perspectiva los propietarios de estos comercios, son también vecinos del barrio”, agregó.
Cabe destacar que el IBP se nutre de información que procede de cientos de verdulerías, carnicerías y almacenes.
A su vez, defendió el índice instrumentado por el CIPPES: «se construye desde una mirada inclusiva, en la cual los comerciantes no son controlados ni estigmatizados. Colaboran con sus vecinos prestándose al relevamiento de precios, y en retribución reciben de éstos, un informe mensual gratuito que les permite comparar los precios de su comercio, con centenares de comercios del mismo rubro”, afirmó Gallo.