El Gobierno propone una reforma tributaria que «elimine distorsiones»

País (31/10/17). El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, realizó este martes la presentación del proyecto de reforma del sistema tributario, la cual tendrá un costo fiscal de 1,5 por ciento del PBI en 5 años, pero se equilibrará con la baja en la evasión y el crecimiento de la economía.

Desde el microcine del Palacio de Hacienda, el titular de la cartera detalló los principales ejes, orientados a un sistema más eficiente y equitativo que, sin perder recursos fiscales, promueva inversiones y genere nuevos puestos de trabajo.  

Al afirmar que el gobierno kirchnerista multiplicó las distorsiones del sistema tributario y terminó asfixiando el crecimiento económico, desde la administración macrista afirmaron que la propuesta dada a conocer este martes implica «una reforma tributaria que elimine distorsiones y nos permita avanzar hacia un sistema más equitativo, que contribuya a la creación de empleo de calidad, fomente la inversión y el desarrollo económico».

Se indicó además que la implementación de la reforma será gradual para asegurar la sustentabilidad fiscal y proveer un marco de previsibilidad a la sociedad.

En cuanto al eje inversión y generación de empleo, la cartera de Hacienda expresó que se busca reducir en un plazo de cuatro años la alícuota del impuesto a las ganancias de 35% a 25% para ganancias que no se distribuyan. Así, las empresas tendrán mayores incentivos a reinvertir sus utilidades.

Asimismo, se impulsa un régimen de devolución acelerada de saldos de IVA para inversiones de largo plazo que subsane la distorsión que actualmente genera el impuesto.

El Gobierno también se plante el objetivo de reducir el costo de contratación de los trabajadores menos calificados para promover su ingreso al mercado laboral formal.

Por eso, el Ejecutivo nacional propone la implementación gradual (en cinco años) de un Mínimo no Imponible (MNI) para contribuciones patronales, con el cual los primeros $12.000 de remuneración bruta no pagarían estas contribuciones. Esto incrementará la demanda de trabajo, impactando positivamente sobre el nivel de empleo y de ingresos de los trabajadores, se destacó.

Por otro lado, se remarcó que los impuestos en cascada (impuesto a los créditos y débitos bancarios -ICDB- y los provinciales a los ingresos brutos) son una fuente de distorsiones del sistema impositivo. En este punto, la administración central impulsa aumentar gradualmente hasta 100% el porcentaje del ICDB que pueda pagarse a cuenta de ganancias. También se advirtió que se trabaja en acuerdos con las provincias para que reduzcan gradualmente las alícuotas de los impuestos a los ingresos brutos y a los sellos.

Al referirse a la meta de eficiencia y equidad, desde la cartera a cargo de Dujovne se resaltó que se avanza hacia «un sistema tributario más justo y equitativo». Ante ello, se propone  gravar la mayor parte de las rentas financieras actualmente exentas, con tasas del 15% para las colocaciones en UVA/CER/moneda extranjera y 5% para las colocaciones en pesos, con un mínimo no imponible para preservar a los pequeños ahorristas. 

Otra de las propuestas que incluye la reforma tributaria es la eliminación del impuesto a la transferencia de inmuebles (ITI) e introducción de un impuesto a la ganancia de capital realizada con la venta de inmuebles no destinados a casa-habitación.

Con esta modificación se reducirá «los costos de acceso a la vivienda y fomentará la formalización de la actividad inmobiliaria», se acentuó.

Sobre los impuestos internos, Hacienda destacó que se reducen los que gravan productos electrónicos, que hace tiempo dejaron de ser artículos de lujo y se utilizan en casi todas las actividades productivas. Los celulares, televisores y monitores tienen una alícuota de 17% y, si prospera en el Congreso la iniciativa oficial, sería eliminada.

Además, se apunta a diferenciar la imposición entre vehículos de distinta gama, por lo que se propone reducir los impuestos para los vehículos de gama media y aumentarlos para los de alta gama. En este sentido, Dujovne anunció que bajarán las alícuotas de automotores y motos de gama media de diez a cero por ciento y subrayó: «Vamos a subir de 10 a 20 por ciento las de aeronaves de gama alta».

En el caso de productos perjudiciales para la salud, la finalidad es desincentivar su consumo a través del aumento de impuestos a las bebidas alcohólicas y bebidas con azúcar agregado. Por caso, Cervezas del 8% pasará al 17%; Vinos y sidras del 0% al 10% (gradual); Gaseosas 17% (con azúcar añadido).

Otro ítem es la modificación del impuesto a los combustibles para que este dependa de la cantidad de dióxido de carbono emitido. El impuesto afectará al principio a combustibles líquidos y de 2020 en adelante se aplicará también sobre gas natural, GLP y carbón.

Por último, en alusión al impacto de la reforma, el área económica del Gobierno sostuvo que implicará una reducción en la presión tributaria nacional de 1,5 puntos del PBI al cabo del quinto año, lo que se sumará a la reducción de 2 puntos del PBI que tuvo lugar desde 2016 y a la baja del impuesto inflacionario a partir de este año.

«Gracias a la reforma bajará la evasión y crecerá más rápido la economía (en 0,5% del PIB adicional por año durante al menos 5 años), con estos impactos la reforma le costará al Tesoro Nacional solamente 0,3% del PBI a la vez que aumentará los recursos coparticipados a las provincias», se apuntó.