Córdoba/País. “Volver a regular tarifas significa que La Campora nos dirá cuánto debemos pagar para poder volar», afirmó el legislador nacional del PRO en su rechazo a la medida.
El diputado nacional Gustavo Santos (PRO-Juntos por el Cambio) se pronunció hoy sobre la regulación de tarifas aéreas dispuestas por el Gobierno K.
“Volver a regular tarifas significa que la Campora nos dirá cuánto debemos pagar para poder volar. Le entregan el cielo argentino a La Cámpora», cuestionó el opositor.
En este sentido, el referente macrista advirtió: «Quieren ser los dueños de todo, aún de nuestra libertad, quitándonos la posibilidad de elegir entre la libre competencia. Van por un cielo único y monopólico para financiar los desmanejos y la ineficiencia de Aerolíneas». «Ese fue el regalo de Navidad de Alberto a Cristina”, acentuó.
En su rechazo a la medida, el exministro de Turismo de Mauricio Macri aseguró que «el gobierno nacional va a contramano del mundo y a favor de los negocios de los propios». «Regulacion total es monopolio lo que redunda en menos competencia y mayores precios. Otra vez pierde Argentina y los argentinos”, subrayó.
Santos recordó que “durante nuestra gestión nos costó mucho esfuerzo desregular las bandas tarifarias. ¿Por qué una empresa no puede ofrecer el precio que quiera de acuerdo al mercado y la competencia? Las Low Cost no serán tales si les ponen un piso tarifario elevado”.
Y agregó: “Da pena y bronca que de ese cielo repleto de distintas aerolíneas -en donde miles de argentinos volaron por primera vez- hoy tengamos esta triste realidad”.
Por último, el diputado nacional enfatizó que “hablan de ‘exceso de oferta’ como si fuese predatorio que la gente pueda viajar barato. Hacen este anuncio justo cuando -por ejemplo- Fly Bondi y JetSmart anunciaron inversiones importantes». «Esta es una forma de espantarlos y decirles que no inviertan más”, completó.
El Ejecutivo nacional volverá a aplicar bandas tarifarias, que incluyen precios mínimos y máximos, para los vuelos internos del transporte aerocomercial. La medida se concretó a través de un decreto publicado en la víspera de Navidad en el Boletín Oficial.
La decisión de la Casa Rosada, criticada por las empresas aéreas privadas, deberá ser implementada en un plazo máximo de seis meses.